Mergers & Acquisitions, Compraventa de empresas

¿Hay movimiento en el sector tecnológico?

El tiempo toma otra dimensión cuando hablamos del sector tecnológico. La presión por no perder el ritmo de creación e innovación hace que cuando una compañía presenta una novedad todo el mundo se pregunte cual será el siguiente paso.

Las empresas del sector tecnológico español se caracterizan, principalmente, por tener un tamaño pequeño (13,5 trabajadores de promedio según Ametic, Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnologías de la Información, Telecomunicaciones y Contenidos digitales), una alta cualificación profesional y cierto descuido en I+D+i, principalmente originado en etapas anteriores de alta demanda de sus servicios.

Muchas compañías están consumiendo su capacidad financiera para mantenerse en la situación de crisis actual, pensando que la demanda interna va a volver de forma más o menos inmediata.

Dado que el ritmo de recuperación todavía está lejos de acelerarse, la búsqueda de nuevos productos o mercados requiere de recursos financieros que no siempre están disponibles. Si el empresario tecnológico está dispuesto a vencer sus reticencias para abrir su empresa y dar cabida a nuevas soluciones financieras, el corporate finance es un arma interesante que le puede permitir integrarse con otras compañías para ganar tamaño, compartir conocimiento, know how y mercados; o estructurar la búsqueda de socios -financieros o industriales- y de fuentes alternativas de financiación que le permitan seguir el ritmo de los tiempos.

Seguramente alguien ya se estará preguntando, pero todo esto ¿es posible o es mera literatura? Veamos qué está ocurriendo en el sector.

En España, en el año 2013, se materializaron un total 105 operaciones corporativas, de las cuales, sólo se cuantificaron 76 que sumaron inversiones por importe de 535,6 millones de euros. El panorama en el primer trimestre de 2014 va cogiendo ritmo respecto al mismo periodo del año anterior, se han producido 37 operaciones corporativas frente a las 32 de 2013, un 15,6 por ciento más.

Sin embargo, la comparativa trimestral del volumen de la inversión normalizada -quitando las operaciones por importe superior a 25 millones de euros- pasa de 48 millones en 2013 a 27 millones en 2014, lo que reduce el importe medio de inversión de 3,5 millones en 2013 a 1,2 en 2014.

Dada distinta tipología de los proyectos y las fases de desarrollo en el que se encuentran consideramos más significativo el número de operaciones, como indicador de actividad corporativa y de apetito inversor, que los importes de inversión.

Los actores siguen siendo básicamente los mismos, el 76 por ciento de las operaciones las han protagonizado inversores financieros -capital riesgo, family office y business angels- frente al 24 por ciento protagonizadas por inversores industriales, es decir empresas que participan en otras empresas. Esta tendencia se mantiene muy estable respecto al año anterior.

La opción corporativa preferida sigue siendo las ampliaciones de capital, con un comportamiento en el primer trimestre de 2014 prácticamente idéntico al año 2013, han representado el 81 por ciento de las operaciones con importes de inversión inferiores a 25 millones de euros.

La sequía de deuda bancaria y el mayor riesgo empresarial percibido por las entidades financieras en proyectos tecnológicos incipientes, hará que las ampliaciones de capital sigan siendo en el futuro las grandes protagonistas. En cuanto al tamaño medio de las operaciones por tamaño de empresa, observamos un descenso en este primer trimestre en los importes medios normalizados de todas las categorías respecto al año anterior, excepto en las startup.

La inversión media en las startup ha sido de 0,7 millones (0,5 en 2013), en la pequeña empresa 1,3 millones -frente a 2,4 en el año anterior-, en la mediana 3,6 millones -frente a 7,1 en 2013- y en la grande 3,5 -frente a 15,3 en el año anterior-.

El subsector más activo en este primer cuatrimestre ha sido el de empresas de Internet -compañías cuya base de negocio se sustenta en aplicaciones que funcionan en la red- y es donde se han dado las dos operaciones por importe superior a 25 millones de euros, con las ampliaciones de capital en la web entradas.com y Groupalia.

Por debajo de 25 millones hemos visto ampliaciones de capital en clubkviar.com -club privado de lujo gastronómico-, fintonic.com -finanzas personales- o wallapop.com -plataforma de venta de artículos de segunda mano-. En el año 2013 el subsector más activo fue el de empresas de Internet SaaS -desarrollo de soluciones y servicios que se consumen directamente desde la red pagando el usuario por uso- con operaciones como la ampliación de capital en la valenciana Peer Transfer -plataforma de pago electrónico especializada en la industria educativa- o en la firma de servicios jurídicos online Derecho.com.

En el último informe de estabilidad financiera publicado por el Banco de España -mayo 2014- se dice que «el crédito al sector privado residente en los negocios en España ha seguido reduciéndose, si bien desde mediados de 2013 se aprecian algunos síntomas de estabilización en el ritmo de contracción, rompiéndose la trayectoria de intensificación de la caída que venía observándose desde principios de 2011».

Este escenario sigue manteniendo en plena vigencia el análisis y la consideración de las opciones corporativas frente a la financiación bancaria tradicional.

Artículo elaborado por Francisco Duato, Socio de ONEtoONE Corporate Finance para El Economista.

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