Conflicto de intereses en las operaciones de MBO

Las operaciones de MBO (Management Buy Out) son un tipo de operaciónes de compraventa de empresas, donde el comprador es la propia junta directiva de la compañía. Este tipo de operaciones son más comunes de lo que parece, y suelen estar cargadas de conflictos de intereses entre los directivos y los accionistas.

El principal motivo del conflicto reside fundamentalmente en el incentivo que se presenta al equipo directivo de adquirir la empresa al menor precio posible, incrementando de esta forma su rentabilidad futura; mientras que el interés de los accionistas, para los cuales ellos trabajan, es maximizar el precio de venta de la compañía. Además del dinero, existen otros motivos por los que puede existir conflicto: El tiempo que el equipo directivo involucrado en la operación debe dedicar a estructurar la misma, la gestión de la confidencialidad durante el proceso y la posibilidad de que se desanimen a las ofertas competidoras. Todos estos factores son de especial relevancia a la hora de evaluar esta opción, por ello la gestión de proceso de compraventa promovido por MBO deben realizarse acompañado de un equipo especialista. La empresa contratada será la encargada de agilizar el proceso y de intermediar entre ambas partes.

Soluciones para evitar estos problemas:

Antes de avanzar en un proceso de este tipo, el equipo directivo debería comunicar (a su debido tiempo) al Consejo de Administración y, a través de este, a los accionistas, las intenciones de adquirir la compañía. Una vez comunicado al Consejo de Administración se deberá conformar un Comité ad hoc dentro del seno del propio Consejo, encargado de velar por los intereses de los accionistas durante la operación.

Una fórmula que se suele utilizar en operaciones de MBO, es incluir en el acuerdo de compraventa final una clausula llamada en inglés go-shop, mediante la cual los accionistas de la empresa tienen un lapso de tiempo para buscar en el mercado mejores ofertas.

Por último, es muy importante que los ejecutivos contraten y asignen la responsabilidad de negociación a un asesor especializado en este tipo de operaciones, dada la complejidad del proceso, y la dedicación que se necesita para que se resuelva con éxito.

 

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